7.6.07

El Ermitaño


Dulce soledad,
que en tus brazos tienes

a aquel que desligarse quiere

y asolar todo lo construido,

aquel que anhela asilo en sí mismo

y solitariamente lo busca,
y se refugia en él;
su coraza no permite ver su soledad

y con desdén se aparta

1 comentario:

Anónimo dijo...

that's so wonder :)